Beneficios de la lectura en niños

Beneficios de la lectura

La lectura desde las edades más tempranas ayuda al desarrollo del cerebro, de las habilidades lingüísticas, estimula la creatividad y consolida la relación entre padre/madre y hijo/hija. Los libros ofrecen una excelente oportunidad para hablar, contar historias, inventar y conectar con los más pequeños.

Los bebés y niños pequeños son como esponjas que absorben prácticamente todo lo que les rodea: desde emociones, estados de ánimo hasta lenguaje verbal y no verbal. los beneficios de la lectura es que mientras les leemos historias, sus mentes funcionan, liberan su imaginación, escuchan activamente y aprenden de las lecciones que enseñan los personajes. beneficios de la lectura

Beneficios de la lectura:
Nunca es demasiado tarde ni demasiado temprano para leerles a los niños.

beneficios de la lectura

Los expertos en crianza animan a los padres a comenzar a leerles a los bebés tan pronto como sea posible, diciendo que nunca es demasiado temprano para introducir a los más pequeños en el mundo de los libros. Podemos comenzar a leerles a los bebés desde los 4 o 6 meses de edad y, de esta manera, los ayudamos enormemente en su desarrollo en todos los aspectos. Leer en voz alta ayuda a construir una red rica de palabras en el cerebro de un bebé. Hay estudios que sugieren que los bebés a quienes los padres les leen con frecuencia conocen más palabras para cuando tienen 2 años que los niños a quienes no se les ha leído.

Beneficios la lectura en voz alta:

Enseña al niño sobre la comunicación.
Introduce conceptos como números, letras, colores y formas de manera divertida.
Desarrolla habilidades de escucha, memoria y vocabulario.
Proporciona a los niños información sobre el mundo que los rodea.

Quizás el mayor beneficio de la lectura en voz alta sea crear un vínculo entre los libros y las cosas que el bebé más ama: la voz y el abrazo del padre o madre. Pasar tiempo leyendo al niño le transmite la importancia de la lectura y los libros. Y si logramos combinar el juego con la lectura, transmitimos alegría y emoción a los niños, aumentando así las posibilidades de que ellos también se conviertan en amigos de los libros.

Leerles a los niños no solo es una forma de inspirarles el amor por los libros desde la infancia, sino también una manera importante de desarrollar el vocabulario de un bebé, primero el vocabulario pasivo (de comprensión) y luego el vocabulario activo (de expresión de la imagen en palabras). A medida que el bebé ve una imagen de un pájaro de color amarillo en un libro y el padre o madre nombra ese pájaro, comienza a hacer la conexión entre lo que el padre o madre dice y la imagen del pájaro amarillo. Cuanto más leemos ese libro, más fuerte se vuelve esa conexión.

8 Beneficios no esperados de la lectura

Fortalece la relación padre-hijo/a

La lectura ofrece una maravillosa oportunidad de conexión. Es una forma hermosa de pasar tiempo juntos y de concluir un día agitado. Además, un estudio publicado en 2008 muestra que la lectura consolida la relación entre un padre/madre y su propio hijo/hija. Los bebés y niños pequeños se sienten seguros cuando los padres les leen.

Desarrolla las habilidades de escucha

Escuchar una historia leída en voz alta implica un cierto nivel de comprensión por parte del niño, y este nivel de comprensión depende de la capacidad del niño para prestar la atención necesaria a la lectura, es decir, de sus habilidades de escucha. Algunos expertos consideran que la escucha es una habilidad que los niños deben adquirir antes de la edad escolar. Además de leer y hojear libros, se anima a los padres a escuchar junto con los más pequeños también historias en formato de audio.

Apoya el desarrollo cognitivo y del lenguaje

Un estudio publicado en 2013 muestra que los bebés a quienes los padres les leen y les hablan mucho tienen un puntaje más alto en habilidades lingüísticas y desarrollo cognitivo, así como en la capacidad de resolver problemas. Otro estudio de 2018 sugiere que estas habilidades, una vez adquiridas, se mantienen al menos hasta la adolescencia.

Enriquece el vocabulario

La lectura ayuda a ampliar el número y la variedad de palabras que los niños usan, ya que a menudo, a través de los libros, los padres les presentan a los niños una multitud de palabras que no se utilizan en las conversaciones cotidianas. Según una investigación de 2019, los niños a quienes los padres les leen regularmente en los primeros 5 años de vida tienen un vocabulario 1,4 millones de palabras más rico que los niños a quienes los padres no les leen.

Desarrolla la capacidad de atención y concentración

La lectura ayuda a los niños a desarrollar habilidades clave de concentración y autodisciplina. Y esto puede ser fácilmente observado por los padres. Por ejemplo, a menudo, los niños pequeños pueden distraerse durante la lectura, pero con el tiempo, se vuelven más tranquilos en su intento de escuchar y comprender la historia. Además, cuando escuchan activamente, los niños mejoran sus habilidades de concentración e incluso de memoria.

Estimula la creatividad

Los libros y las historias abren a los niños un mundo completamente nuevo. A menudo, las historias utilizan elementos fantásticos que ayudan a los niños a pensar de manera no convencional. Los niños ya tienen una imaginación rica, y la lectura alimenta su creatividad, lo cual es importante para desarrollar intereses e ideas, así como para fomentar la salud emocional.

Ofrecen lecciones de vida

Los libros brindan una oportunidad para hablar sobre situaciones del mundo real de maneras apropiadas para la edad. Los niños prefieren especialmente los libros donde los personajes son de su misma edad y hacen cosas que ellos también hacen en su vida diaria. Por lo tanto, los niños pueden encontrar en los libros soluciones para diversas situaciones reales, como jugar en grupo, compartir juguetes, así como diferentes experiencias como ir al jardín de infantes o al dentista.

Estimula el desarrollo social y emocional

La lectura enseña a los niños cómo enfrentar “experiencias difíciles o estresantes”. Los libros que presentan emociones o situaciones con una fuerte carga emocional pueden ayudar a iniciar una conversación sobre los sentimientos de los niños y mostrarles que sus emociones son normales.

Qué les leemos a los niños según su edad

Es importante que cuando comenzamos a leerles a los niños, busquemos libros recomendados para su edad. Por ejemplo, a los bebés que aún no han cumplido los 6 meses les podemos presentar libros con imágenes simples, vivamente coloreadas, brillantes y contrastantes. Podemos hojear estos libros junto con el pequeño, nombrando las imágenes sin necesidad de ofrecer demasiados detalles. A esta edad, no es necesario tener libros con texto.

A medida que los bebés crecen y se acercan a su primer cumpleaños, podemos introducirles libros con frases simples que incluyan 1-2 oraciones que se refieran a la imagen de la página.

Los niños de 1 a 2 años estarán especialmente atraídos por libros con personajes de su edad que hacen cosas comunes e interesantes. También son adecuados los libros que contienen animales, personajes dibujados y que tienen una historia simple.

Después de cumplir los 2 años, el joven lector seguirá siendo atraído por los libros con personajes familiares, pero también por las historias con mucha acción, imágenes y detalles. Se recomiendan los libros con historias cortas, especialmente aquellas que ilustran relaciones causa-efecto o diferentes situaciones que los personajes deben superar.

Los niños más pequeños aún pueden apreciar los libros con muchas ilustraciones y poco texto, pero estarán fascinados por los libros que tienen temas un poco más complejos.

Los niños en edad preescolar ya tienen una amplia gama de habilidades de lectura y se recomienda que se les permita tomar la iniciativa cuando se trata de leer libros simples, incluso si aún no pueden leer el texto exacto de la página, seguramente se esforzarán por inventar historias muy interesantes a partir de las ilustraciones.

A medida que el niño comienza a leer solo, se recomienda que esté cada vez más involucrado en el proceso de lectura. El padre puede indicarle que lea algunas palabras o frases en voz alta. Los padres deben saber que no es necesario dejar de leerle al niño una vez que aprende a leer solo. Aunque la lectura individual es importante, leer en voz alta a los niños mayores de 10 años sigue ofreciendo numerosos beneficios, tanto académicos como emocionales. Después de esta edad, se enfatiza en la fluidez y la comprensión de la lectura.